Elaborado en barro bruñido, este plato presenta un diseño inspirado en las formas ceremoniales del México prehispánico. El motivo de las dos cabezas de ave refleja el lenguaje estético y simbólico de las culturas antiguas, reinterpretado a través de la artesanía contemporánea. Creado por el artesano Pedro en su taller familiar en Acatlán, Puebla, esta pieza es un homenaje a las ricas tradiciones cerámicas de la región.